¿El riesgo del Tantra? Liberación o libertinaje.
Hace unas semanas publiqué una traducción sobre la perspectiva del Tantra y el Vedanta que se puede consultar aquí. Como académico me pareció una visión fascinante para la comprensión de los orígenes de las diferentes escuelas hinduistas y tibetanas que bebieron de dichas fuentes hasta llegar a las tendencias actuales.
La perspectiva actual del Tantra mantiene una distancia importante en los conceptos hindúes, tibetanos y occidentales. Debemos ser consciente que el Tantra actual que se vive en nuestra sociedad es NeoTantra, un nuevo concepto adaptado desde la perspectiva meramente sexual.
El Tantra como parte del camino hacia la liberación y no hacia el libertinaje
Una de las grandes diferencias entre el Tantra y el Vedanta radica en el deseo o no de la experiencia mundana: bubhukshu – el deseo de la experiencia mundana frente a mumukshu.
Una asistente le preguntó a Sadhgurú que es el Tantra. Sadhguru respondió : Desafortunadamente, en los países occidentales, el tantra se presenta de tal manera que se supone que significa sexo sin inhibiciones. Ha sido tan mal interpretado. Esto se debe a que hay libros sobre tantra que han sido escritos por personas que solo quieren vender libros. No son tántricos de ninguna manera. Desafortunadamente, en los países occidentales, el tantra se presenta de tal manera que se supone que significa sexo sin inhibiciones. Ha sido tan mal interpretado. Esto se debe a que hay libros sobre tantra que han sido escritos por personas que solo quieren vender libros. No son tántricos de ninguna manera.
El Tantra bebe de la sintiencia del momento vivido. Ciertamente se puede evocar e invocar aspectos de la Naturaleza a través de conceptos arquetípicos mediante secuencias, ritualísticas y diferentes métodos. Dichos métodos son simples procedimientos que la persona cree necesitar para desarrollar las auténticas capacidades mentales inherente al ser humano. Procedimientos que con el tiempo dejan de ser necesarios. La mente al final sabe que es una con la realidad.
El tantra supone una tecnología aparentemente subjetiva pero que se puede sistematizar.
El peligro del Tantra: el apego.
La sintiencia del momento tántrico puede confundirse con la búsqueda de los placeres terrenales. El apego a los placeres puede inducir confusión al practicante de Tantra, Tal como señaló Brown, el sentido del Tantra radica en la aceptación de la vida diaria con presencia como parte del camino hacia la liberación y no el libertinaje.
Los diferentes enfoques occidentales denominados como Tantra rojo, negro y blanco no dejan de ser visiones alejadas de la cosmovisión oriental. Aluden a la capacidad de utilizar las diferentes ritualísticas para el beneficio particular de cada uno y esto dista del concepto mismo de Tantra.
El practicante de Tantra puede equivocarse al buscar de forma fehaciente experiencias nuevas de todo tipo, que esquiven aspectos básicos de la ética defendiendo que eso es Tantra.